Soy ese tipo de gay al que texteas cuando necesitas decidir entre un outfit o el otro.
Soy ese tipo de gay que te dice que te ves perra cuando lo necesitas.
Soy ese tipo de gay al que le puedes hablar de NBA o preguntarle quién ganó Miss Universe en 2001.
Soy ese tipo de gay al que le cuentas sin miedo con cuántos/as te has acostado.
Soy ese tipo de gay que es excelente plus one… el que te baila y hace que te luzcas frente al tipo que te gusta.
Soy ese tipo de gay que te enseña a bailar para que puedas sorprender a la tipa que te gusta.
Soy ese tipo de gay que cuando coinciden en el baño hace lo posible para dejarte saber que no te está ligando.
Soy ese tipo de gay liberador con el que dejas que ella se emborrache y llegue a las tantas.
Soy ese tipo de gay al que se le explota una goma y te llama.
Soy ese tipo de gay que no es tan gay nah y te pide que lo vistas.
Soy ese tipo de gay que te sirve de bartender mientras juegas dominó.
Soy ese tipo de gay que hace que las amigas exterioricen “siempre supe que eras gay” y que, en cambio, los amigos griten “loco, tú me confundías porque siempre tenías novia”.
Soy el tipo de gay al que le dices: “Chico, mano, y yo que siempre te defendí”.
Soy el tipo de gay que te educa sobre los tipos de penes. ¡Sí, hay dos tipos de penes: el grower y el shower. Google it!
Soy el tipo de gay que hace que lo des todo en la pista.
Soy ese tipo de gay que si la noche evoluciona no te pide explicación, pero sí el location…. Y que al otro día te pide el location una vez más porque necesita, en persona, la explicación CON detalles, el comparativo y el ranking revisado.
Soy el tipo de gay que te dice: “Nena, no pierdas el tiempo y acaba y deja el protocolo que la vida es corta como para quedarse con las ganas”. O que también te dice: “Nena, relájate que esto es pa´ picar, no es para cenar”.
Soy el tipo de gay que te dice: “Protégete que ese pipi preña”.
Soy el tipo de gay que te dice: “No quiero quejas”. Ah, porque sí también soy el tipo de gay que recibe quejas de parejas.
Soy ese tipo de gay que te aconseja: “Chica, tranquila. Él no hizo eso a propósito. Una persona que te ama como te ama no hace eso a propósito; fue sin querer, tienes que ver el big picture”.
Soy ese tipo de gay que te lleva a comprender que no a todos los gays les gusta “que se lo metan” porque… ¡hay roles!
Soy el tipo de gay que rompe el hielo con conversaciones controvertidas, pero las hace sentir como conversaciones incontrovertibles.
Soy ese tipo de gay que se faja tirándote 33 fotos desde tu mejor ángulo, pero al que también le puedes decir: “No, otra más que me veo gorda”.
Soy ese tipo de gay que se imagina cómo la vas a tratar dependiendo de cómo me trates a mí y al mesero.
Soy ese tipo de gay que mientras tú compras el round se queda hablando con ella, no sobre las Kardashians sino de cómo posiblemente lo vas a tener y si de verdad vales la pena.
Soy el tipo de gay que les dice: “Ustedes también tienen que pagar”.
Soy ese tipo de gay que les habla claro y les dice: “No te enamores que él lo que quiere es un booty call”.
Soy el tipo de gay al que le puedes decir: “Eres una chica con tubería”.
Soy el tipo de gay al que le puedes decir gay, pato, maricón, homosexual y no se ofende.
Soy el tipo de gay que está en el medio, el que une o el que separa.
Soy ese tipo de gay que tiene los dos lados de la historia: la versión masculina y la versión femenina.
Soy ese tipo de gay que describe un tipo de gay para crear conciencia.
Soy ese tipo de gay. Soy eso y más. Mucho más. Como yo, hay muchos otros tipos de gay. En esencia, somos ese hombre que piensa como hombre, pero también como mujer. Somos los guardianes de los dos lados de la historia. Somos los que traemos perspectivas diferentes, pero similares. Somos el complemento. Por eso, ese tipo de gay existe. Por eso yo existo… siendo lo que soy, pero gay.
Con MUCHA complicidad,
AJ
PS. Inspirado en mis amigos heterosexuales. Encuéntrense en las líneas.